Bienvenidos

Espero que os sirva de algo la información contenida en este blog, sobretodo a las adolescentes que se ven en esta situación y que, por desgracia, son muchas en la actualidad.A ellas sobre todo les dedico este blog, porque la información ayuda a reducir el miedo.
Me gustaría saber la opinión de todos y asi poder mejorarlo.

viernes, 18 de enero de 2008

Embarazo

La gestación o embarazo es el proceso en el que crece y se desarrolla el feto en el interior del útero. El embarazo se inicia en el momento de la nidación y termina con el parto. La definición legal del embarazo sigue a la definición médica. Para la Organización Mundial de la Salud (OMS) el embarazo inicia cuando termina la implantación. La implantación es el proceso que comienza cuando se adhiere el blastocito a la pared del útero. Esto ocurre 5 o 6 días después de la fertilización. Entonces el blastocito penetra el epitelio uterino e invade el estroma. El proceso se completa cuando la protuberancia villi y el defecto en la superficie del epitelio se cierra. Esto ocurre entre el día 13-14 después de la fertilización.
En 2007 El
Comité de Aspectos Éticos de la Reproducción Humana y la Salud de las Mujeres de la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia (FIGO) definió al embarazo como la parte del proceso de la reproducción humana que comienza con la implantación del conceptus en la mujer.
En la especie humana, las mujeres atraviesan un proceso que dura 40 semanas a partir del primer día de la última menstruación o 38 semanas a partir del día de la fecundación. Por lo común se asocia a 9 meses.
Dentro del útero, el feto está flotando en el
líquido amniótico, y a su vez el líquido y el feto están envueltos en el saco amniótico, que está pegada al útero. En el cuello del útero, se forma un tapón durante el embarazo para evitar que salga el líquido. Y como barrera al ingreso de cuerpos extraños; lo que facilita mucho las relaciones sexuales durante el embarazo, que siguen erotizando a la pareja.
Mientras permanece dentro, el producto de la
fecundación, cigoto, embrión o feto obtiene nutrientes y oxígeno y elimina los desechos de su metabolismo a través de la placenta. La placenta está pegada al útero y está unida al feto por el cordón umbilical, por donde recibe alimento.
De acuerdo a su desarrollo, el embarazo se suele dividir en tres etapas de tres meses cada una, con el objetivo de simplificar la referencia a los diferentes estados de desarrollo del feto.
Durante el primer trimestre el riesgo de aborto es mayor (muerte natural del embrión o feto). Esto tiene mayor incidencia en embarazos conseguidos mediante fecundación in-vitro, ya que el embrión implantado podría dejar de desarrollarse por fallos en los cromosomas heredados de los gametos de sus progenitores.
Durante el segundo trimestre el desarrollo del feto puede empezar a ser monitoreado o diagnosticado.
El tercer trimestre marca el principio de la
viabilidad, que quiere decir que el feto podría llegar a sobrevivir de ocurrir un nacimiento temprano natural o inducido.

DETECCIÓN Y FECHA DE FECUNDACIÓN

El principio del embarazo puede ser detectado de diferentes maneras, incluyendo varias pruebas de embarazo que detectan hormonas generadas por la placenta recién formada. Pruebas clínicas de orina y de sangre detectan el embarazo desde los 6 a 10 días después de la concepción. Las pruebas de embarazo caseras son pruebas de orina personales, que normalmente no pueden detectar un embarazo sino hasta 12-15 días después de la fecundación. Ambos tipos de prueba solamente pueden detectar si la mujer está o no embarazada, pero no la fecha de inicio del embarazo.

PRIMEROS SÍNTOMAS DEL EMBARAZO

Tal vez el primer signo del embarazo sea la sensación de estar embarazada de verdad, algo que tiene que ver con la primera secreción de las hormonas del embarazo. Estas hormonas afectan al cuerpo, así como a la mente y a los sentimientos. Otro de los primeros signos es el cansancio. Aunque algunas mujeres sienten renovada energía, la mayoría confesarían sentir intensa fatiga. Es un tipo de cansancio nuevo. Algunas afirman quedarse dormidas a cualquier hora del día, a veces al poco de haber salido de la cama, y otras aseguran sentir tal somnolencia en la sobremesa. Otras sienten cansancio pronunciado al llegar la noche. Dicha fatiga es a menudo incontrolable y exige el sueño. Nunca se ha encontrado una explicación a este extraño deseo de dormir. Se cree que es un efecto de la progesterona, que alcanza niveles elevados en la sangre a comienzos del proceso. Esta hormona es un sedante para los seres humanos, con fuertes efectos tranquilizantes e hipnóticos. En las etapas posteriores se presenta otro tipo de fatiga debida simplemente a cansancio corporal, pero rara vez ocurre en el primer trimestre del embarazo.


Al cabo de dos semanas de ocurrida la fecundación notará la ausencia de menstruación. Es un signo sospechoso del embarazo. Se denomina amenorrea secundaria. Además del embarazo son causas de la amenorrea una enfermedad física grave, un shock muy fuerte, el efecto de un viaje en avión, una operación o la ansiedad pueden retrasar la menstruación. También es común tener una leve hemorragia una vez embarazada, en el momento del período normal.

Mareos matutinos


Las náuseas, a veces acompañadas de vómitos, suelen conocerse como mareos matutinos, aunque pueden ocurrir a otras horas del día. También náuseas al oler algún tipo de comida. Raramente continúan tras los tres meses y desaparecen gradualmente. La causa radica en el creciente nivel de hormonas que circulan por la sangre, que pueden tener un efecto directo en las paredes del estómago. Una de ellas, la gonadotrofina coriónica humana (GCH), se produce para contribuir a los niveles de estrógenos y progesterona que mantienen el embarazo. Su existencia en la orina confirma el embarazo. La acumulación de GCH corre más o menos paralela a los momentos de las náuseas, y empieza a disminuir entre las 12 y las 14 semanas. Las hormonas provocan una rápida eliminación de azúcar de la sangre, lo que puede hacer sentir hambre y mareos.

Gustos y antojos

El cambio en el gusto y la preferencia por ciertos alimentos puede ser uno de los primeros signos. Es común el rechazo a ciertos alimentos y bebidas (frituras, café, alcohol), y al humo de cigarrillos. A menudo se describe un sabor metálico en la boca que hace variar el gusto por los alimentos. Se cree que los antojos se deben al aumento de los niveles hormonales; a veces se experimentan en la segunda mitad del ciclo menstrual por el mismo motivo. No satisfaga antojos con alimentos de alto contenido calórico, cuyo poder nutritivo sea bajo.

Deseos frecuentes de orinar


A medida que se distiende el útero, oprime la vejiga. Por tanto, ésta trata de expulsar pequeñas cantidades de orina, y muchas mujeres sienten deseos frecuentes de orinar desde la primera semana tras la concepción; quizás necesiten ir al cuarto de baño cada hora. Esto también se debe al efecto de la progesterona, ya que es un potente relajante de músculo liso, (que es el músculo del cual esta formado la vejiga, el útero y otros órganos) lo cual sirve para manterner al útero en reposo hasta el momento del parto. Salvo que sienta ardor o dolor al orinar, no es necesario que consulte al médico. Hacia las 12 semanas, el tamaño del útero aumentará, de modo que subirá y saldrá de la cavidad pelviana. Esto reducirá la presión sobre la vejiga y la frecuencia de la micción por lo que la vejiga se va hacia un lado.

EMBARAZO DE RIESGO:FACTORES QUE INFLUYEN

Diversos factores aumentan la posibilidad de que una mujer tenga un embarazo de riesgo:

  • Edad menor a 14 años o mayor a 35 años
  • Enfermedades anteriores o durante el embarazo: anemia, alcoholismo, diversas cardiopatías, diabetes, hipertensión, obesidad, diversas enfermedades infecciosas, afecciones renales o trastornos mentales.
  • Embarazos múltiples.
  • Problemas en un embarazo previo.
  • Hijos anteriores con alguna malformación.
  • Peso corporal menor de 45 kg o mayor a 90 kg (varia de acuerdo a talla).
  • Talla menor a 140 cm.

EMBARAZOS DE CUIDADO ESPECIAL:

Hay embarazos que, por sus especiales circunstancias, requieren un cuidado y un seguimiento específico. En ellos pueden surgir complicaciones o problemas imprevistos que deben ser atendidos pronta y profesionalmente para evitar colocar a la madre o al bebé en situación de riesgo.

Embarazos en adolescentes


El 40% de mujeres en países en vías de desarrollo tiene un parto antes de cumplir 20 años. Muy pocos de estos embarazos son planeados o deseados por las adolescentes. Muchas de ellas son forzadas por las presiones sociales a tener matrimonios tempranos y embarazos tempranos, o son resultado de adolescentes a las que se les negó libre acceso a anticonceptivos. El embarazo en adolescentes puede tener consecuencias adversas para la salud tanto de corto plazo como de largo plazo. En el corto plazo el resultado del embarazo será muy probablemente desfavorable. Una razón es biomédica. La niña adolescente embarazada es más propensa a sufrir toxemia de embarazo y desproporción cefalo-pélvica cuando los huesos de la pelvis no se han desarrollado completamente. y tiene más probabilidades de tener un bebé con bajo peso de nacimiento. Otro tipo de consecuencias a largo plazo son las fístulas obstétricas, que a consecuencia del trabajo de parto prolongado u obstruido, es un orificio entre la vagina y la vejiga o el recto, lo cual causa que la mujer padezca de incontinencia crónica. Este padecimiento afecta a más de dos millones de niñas y mujeres en todo el mundo y se estima que cada año se agregan entre 50.000 y 100.000 nuevos casos.

Anemia

El estado de anemia ya existente no es obstáculo para el embarazo: un 20% de las mujeres pueden estar algo anémicas antes de concebir. La forma más común de anemia se debe a la pérdida de sangre durante la menstruación, y es una anemia por deficiencia de hierro (cuando el nivel de hemoglobina es inferior a 12,8 g/100 ml de sangre). Antes de concebir sería conveniente consultar al médico, quien podrá corregir fácilmente la anemia por deficiencia de hierro con un tratamiento específico. También podrá aumentar la ingestión de alimentos ricos en hierro.

Hemorragia preparto

Antes de las 24 semanas, una hemorragia vaginal puede desembocar en aborto. Después, el feto se considera viable, es decir que podría sobrevivir fuera del útero materno. La hemorragia tras las 24 semanas se conoce como hemorragia preparto, y las dos causas principales proceden de la placenta.

Desprendimiento de placenta

Si la placenta se desprende del útero, se producirá hemorragia. La sangre se acumula hasta derramarse por el cuello del útero, y va acompañado de dolor intenso y contracciones uterinas. Se considera una urgencia obstétrica, ya que pone en peligro la vida tanto de la madre como la del feto y solo en casos muy especiales no termina en cesarea de urgencia.

Placenta pprevia

Cuando la placenta está adherida a la parte inferior de la pared del útero, se denomina placenta previa. Si se encuentra total o parcialmente sobre el cuello uterino, puede resultar peligrosa durante el parto, al provocar hemorragia e interrumpir la circulación sanguínea del feto. El problema se detecta con ultrasonido. Si se produce hemorragia, la ingresarán en el hospital y el niño nacerá mediante cesárea.

Diabetes

Si la embarazada tiene diabetes mellitus debe asegurarse de tener bajo control su situación antes de quedarse embarazada, para que las posibilidades de tener un hijo sano y un parto normal sean lo más altas posibles. Es probable que necesite una mayor cantidad de insulina durante el embarazo y su doctor se encargará de hacer un seguimiento detallado de la cantidad que precise en cada momento, pues puede variar. También es probable que deba acudir con mayor frecuencia al hospital para realizar las pruebas prenatales y deberá poner un especial cuidado en su dieta.
Hay mujeres a quienes se les diagnostica
diabetes mellitus gestacional, un tipo de diabetes que se desarrolla sólo durante el embarazo y que suele desaparecer poco después del parto. Los riesgos de este tipo de diabetes son menores y raramente se precisa insulina; con reducir la ingesta de azúcar suele ser suficiente.
La complicación principal en los hijos de madres con diabetes gestacional es la macrosomia fetal (niños con peso mayor de 4 kilos)

Embarazo ectópico

El embarazo ectópico se desarrolla fuera del útero, por lo general en una de las trompas de Falopio, pero puede ser también en los ovarios, en el cuello uterino, o en órganos intraabdominales. Puede provocar dolor abdominal por el crecimiento del embrión en la trompa o por una hemorragia abdominal interna. Desgraciadamente, es difícil diagnosticar un embarazo ectópico y todavía hay mujeres que mueren como consecuencia de ello. Hay una serie de condicionantes que favorecen el aumento de riesgo de padecer embarazos ectópicos. Entre ellos, una historia anterior de infección pélvica, el uso de un dispositivo intrauterino contraceptivo (aunque no la espiral de Mirena) y un embarazo ectópico previo. Las mujeres que reúnan alguno de los condicionantes referidos son controladas de inmediato en un centro maternal para asegurarse de que el desarrollo del embarazo es normal. El embarazo ectópico debe ser tratado mediante cirugía o con un fármaco. Las operaciones consisten en cirugía laparoscópica o abierta, dependiendo de las circunstancias y de las condiciones de la madre, y suelen conllevar la extirpación de la trompa afectada. Suelen causar una reducción de la fertilidad.

Cardiopatía

La mayoría de las mujeres con problemas cardiológicos llevan un embarazo perfecto, aunque a veces deban recurrir a los antibióticos para proteger sus arterias en el momento de dar a luz. Si padece alguna cardiopatía importante, el cardiólogo se encargará de comunicárselo. Las mujeres con marcapasos, un trasplante de corazón y otra operación coronaria pueden llevar un embarazo seguro y normal. Las que presenten anormalidades musculares deben consultarlo antes de quedarse embarazadas.

Hipertensión

Se denomina hipertensión al aumento de la presión sanguínea. Esta tiene dos componentes, por ejemplo: 120/70. Un aumento de la cifra menor, la presión diastólica, es motivo de preocupación para los médicos, ya que corresponde a la medida del bombeo cardíaco en reposo. Si padece hipertensión, es recomendable que la mujer consulte a su médico antes de quedarse embarazada. Posiblemente se le indique un cambio de fármacos y se le haga un seguimiento de su estado renal. Con una atención correcta, no hay ninguna razón que impida tener un embarazo y un parto normales, aunque puede que la mujer ingrese antes de tiempo en el hospital. Si durante el embarazo desarrolla hipertensión, la atenderán en un centro de día, donde controlarán su presión. Ahora bien, en algunos casos más severos se recomendará el ingreso. A veces, será necesario avanzar el parto, mediante cesárea, a causa de la presión de la sangre materna en el bebé. Un aumento de la presión arterial al final del embarazo puede ser síntoma de pre-eclampsia, una afección muy seria.

CAMBIOS FISIOLÓGICOS DURANTE EL EMBARAZO

La mujer embarazada se encuentra en un estado hipervolémico crónico. El volumen de agua corporal total se incrementa debido al aumento de la sed y a la retención de líquidos. Esta mayor cantidad de agua ocasiona dilución de la sangre, lo que explicaría la anemia fisiológica propia del embarazo.
Aumenta el gasto cardiaco, el volumen urinario (por el estado hipervolémico antes descrito), la frecuencia respiratoria, la depuración de
creatinina, entre otros.

CAMBIOS FÍSICOS Y PSICOLÓGICOS DURANTE EL EMBARAZO

PRIMER TRIMESTRE:

Algunas mujeres no parecen estar embarazadas durante el primer trimestre del embarazo. Sin embargo, en este periodo el cuerpo de la mujer se está adaptando al embarazo y está experimentando grandes cambios hormonales que pronto dejarán sentir sus efectos.

1. Ausencia de menstruación
2. Aumento del volumen y de la sensibilidad de los pechos
3. Pigmentación más oscura de los pezones
4. Sensación de cansancio y sueño
5. Posibles náuseas y mareos, sobre todo, por la mañana
6. Aumento de peso de entre 1 y 2 kilos
7. Aumento del tamaño del útero
8. Aumento de las secreciones vaginales
9. Molestias leves en la pelvis
10. Frecuentes ganas de orinar
11. Cambios bruscos de humor
12. Inseguridad y ansiedad

SEGUNDO TRIMESTRE

Por lo general la mujer comienza a sentirse mucho mejor en este periodo, ya que desaparecen algunas de las molestias iniciales.


1. Se aumenta cerca de 4 kilos de peso
2. Los pechos en algunos casos segregan calostro
3. Se pierde el talle
4. Se notan las primeras señales de los movimientos del feto
5. Aparece la línea nigra debajo del centro del abdomen
6. Aparece el cloasma o máscara del embarazo
7. Pueden surgir molestias físicas como ardor de estómago o congestión nasal
8. Se tienen sentimientos positivos y una sensación de fortaleza
9. La madre sueña con su futuro hijo

TERCER TRIMESTRE

En esta última etapa del embarazo, la mujer ya sólo piensa en el parto y en su deseo de ver al bebé.

1. Aumento de entre 3 y 5 kilos de peso
2. Aparición de cansancio y dolores de espalda de nuevo
3. Frecuentes ganas de orinar
4. Aumento de la transpiración
5. Contracciones uterinas de Braxton-Hicks
6. Preocupación y temor ante la llegada del parto

DESARROLLO DEL FETO

Primer mes

El aspecto del embrión es similar a un disco. La cabeza empieza a desarrollarse a partir de la primera semana y, casi al cumplirse el mes, el corazón comienza a latir. A su alrededor comienza a formarse la placenta. Mide cerca de 4 milímetros y pesa menos de un gramo.

Segundo mes

Se forman los ojos, empiezan a crecer los brazos y las piernas. Los órganos internos y el cerebro se van desarrollando. El embrión mide 3 centímetros y pesa unos 3 gramos. Flota dentro de una especie de bolsa llena de líquido amniótico.

Tercer mes

Ya está plenamente formado y mueve las piernas y los brazos. Tiene párpados y mide unos 10 centímetros. Pesa unos 45 gramos.

Cuarto mes

La piel del feto es transparente y fina. Su cuerpo ya está completamente cubierto de un fino vello llamado lanugo. Su intestino se empieza a llenar de una sustancia verdosa llamada meconio. Pesa unos 180 gramos y mide algo menos de 15 centímetros.

Quinto mes

Se chupa el dedo y empieza a desarrollar sus sistemas de defensa. Ya tiene pelo en la cabeza, así como pestañas y cejas. Su peso se sitúa en torno al medio kilo y mide entre 18 y 20 centímetros.

Sexto mes

Pasa entre 18 y 20 horas durmiendo y, cuando está despierto, se mueve mucho. Su cara está terminada y ya abre los ojos. La piel se cubre de una grasa conocida como vérnix caseoso. Mide alrededor de 25 centímetros y pesa casi un kilo.

Séptimo mes

El feto responde a los ruidos externos con movimientos y empieza a faltarle sitio en la cavidad uterina. Aparecen los primeros movimientos respiratorios, aunque sus pulmones no funcionarán de forma independiente hasta después de nacer, una vez cortado el cordón umbilical. Mide algo menos de 30 centímetros y pesa alrededor de 1500 gramos.

Octavo mes

Suele colocarse boca abajo. La piel se hace más espesa y empieza a tomar un tono rosáceo. Su tamaño es de 35 centímetros y ya pesa unos dos kilos y medio.

Noveno mes

El feto recibe anticuerpos de la madre y sus pulmones ya están preparados para funcionar en el exterior. La piel deja de estar arrugada y el lanugo se cae casi por completo. Pesa cerca de 3 kilos y mide unos 50 centímetros.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me parece muy interesante todo lo que recoges en este trabajo, así como el que pude ver en los otros que recomiendas.Saludos Cristina